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Hipnosis como apoyo al tratamiento médico

Hay por lo menos, 3 grupos de enfermedades o problemas de salud, que podrían  beneficiarse por el uso de la Hipnosis, de manera conjunta con el tratamiento médico. 

1- Enfermedades que requieren cambios en los hábitos y en el estilo de vida: 

Por ejemplo, enfermedades cardiovasculares (hipertensión, cardiopatías, arteriopatías obstructivas), diabetes, asma y EPOC, entre otras; muy a menudo, requieren que el paciente cambie uno o varios hábitos, de manera continua y sostenida (dejar de fumar, bajar de peso, realizar actividad física regular, seguir una alimentación saludable, seguir una  dieta hiposódica, seguir una dieta baja en azúcares, etc.). 

El mayor problema radica, en que el médico prescribe estos cambios, pero muchas veces el paciente, no encuentra la manera de establecer y mantener con facilidad los nuevos hábitos. Yo utilizo la información médica, para saber y asesorar al paciente sobre cuáles cambios tiene que realizar y como, y las sesiones de hipnoterapia, para ayudarlo a acceder a sus recursos internos (sus fortalezas mentales y emocionales), que le permitan lograrlos y sostenerlos. 

2-Enfermedades, que por su padecimiento intenso y/o crónico, aumentan considerablemente el nivel de ansiedad y estrés. 

Enfermedades crónicas, como por ejemplo enfermedades autoinmunitarias, y dolor crónico, o enfermedades complejas de tratamientos prolongados, como varios tipos de cánceres, pueden elevar el nivel de estrés. 

Es que el estrés, es, en realidad, una respuesta física, psicológica y conductual, normal en cualquier situación, donde de alguna manera nuestro cuerpo, o nuestra mente, se sienten desafiados o amenazados.  

Los efectos nocivos para la salud aparecen cuando este estrés es grande, o cuando se desencadena de manera sostenida. 

El aumento de los niveles de cortisol, adrenalina, y otras sustancias, puede producir (entre otras cosas): supresión del sistema inmunitario, aumento de la presión arterial, cambios en el metabolismo de los carbohidratos, proteínas y grasas, problemas digestivos, cambios en el estado de ánimo, y trastornos del sueño.  

Con todo esto, resulta fácil entender por qué, es prioritario reducir el nivel de estrés asociado a una enfermedad: 

Un nivel alto de estrés, por sí mismo, puede enfermar.

Un nivel alto de estrés, no es recomendable para restablecer la salud y tratar una enfermedad. 

Incluso, cuando la persona sabe por indicación médica, que tiene que reducir su nivel de estrés, muchas veces, no encuentra la manera de hacerlo.

Si quieres más información sobre los mecanismos del estrés, y los beneficios que la hipnosis puede tener en su reducción,   mira el apartado de hipnosis para el manejo del  estrés y la ansiedad.

3- Enfermedades, que por su componente psíquico involucrado, podrían beneficiarse directamente de la hipnosis. 

Existen enfermedades, cuyos síntomas y manifestaciones primarias están estrechamente vinculados al manejo de aspectos mentales y emocionales. 

Algunos ejemplos son:   algunos tipos de dolor crónico, migrañas, síndrome de colón irritable, insomnio, ansiedad, y depresión. La combinación de la hipnosis con el tratamiento médico, podría ofrecer una opción eficaz para el manejo de estas enfermedades.

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